Morro de tiburón, luneta envolvente y luces traseras minimalistas. El Ferrari Roma, inspirado en la elegancia de la Dolce Vita, hace alarde de unas proporciones perfectas con unas formas armoniosas y esenciales, privas de todo elemento superfluo. El espíritu netamente deportivo del Cavallino Rampante se enfatiza con el motor V8 turbo y el cambio de 8 velocidades.